Ana María Valderrama presenta con Víctor del Valle su CD más personal
Una reflexión sobre la vida y sus contradicciones
Tras su primer álbum “A mon ami Sarasate” en el que grabó obras muy solísticas y virtuosísticas, Ana María Valderrama ha querido en su segundo CD, y su primera colaboración discográfica con el pianista Víctor del Valle, reunir dos grandes hitos de la literatura para violín y de la música de cámara compuestas el mismo año por dos autores contemporáneos que no llegaron nunca a coincidir personalmente. En 1886 Johannes Brahms empezó a escribir Sonata para violín nº 3 y César Franck finalizaba su célebre Sonata en La mayor, dos obras compuestas en la plenitud creativa de sus autores que muestran sus distintas personalidades.
“Aunque son obras que he tocado desde muy jovencita, para esta grabación hemos hecho un trabajo de análisis muy profundo. Hemos querido acercarnos a esta música de la manera más informada, para sentir que estamos lo más cerca posible de la visión que tenía el compositor… Y estamos muy contentos con el resultado”, señala Valderrama Pero más allá de lo puramente musical, el disco refleja también la etapa de madurez y cambios de la violinista, a través de dos sonatas con un complejo mundo emocional.
“Es un disco muy personal que ha llegado en un momento especial: fue concebido en una época reflexiva y de cambios en mi vida. Perdí a una persona importante para mí y, poco después, me quedé embarazada de mi primer hijo”. Por ello, ha querido que la elección del repertorio reflejara esa dualidad: por un lado, la tonalidad de Re menor, tan relacionada con la muerte en la sonata de Brahms, y por otro lado la sonata de Franck, en La Mayor y con estructura cíclica, que representa la vida, el amor, con todas sus contradicciones.
El álbum, grabado en la Sala Mozart del Auditorio De Zaragoza, con el sello discográfico Eudora, se completa con otras dos obras de los mismos compositores: el Scherzo compuesto por Brahms para la Sonata FAE, una sonata cuyos movimientos fueron repartidos entre Robert Schumann, Albert Dietrich y Brahms y que durante mucho tiempo estuvo en el olvido, y Mélancolie de Franck, una obra poco conocida, pero de una gran belleza, introspectiva, nostálgica y llena de sutileza. El piano tiene un papel fundamental en el disco, de mano de Víctor del Valle, que trabaja por primera vez con Ana María Valderrama en un proyecto discográfico.
Todalamusica.es
Mayo 2018